Por Carlos Sánchez, colaboración especial
Álamos.- Es un paisaje. Muchos paisajes. La naturaleza en edición desde el ojo del fotógrafo Mario Sánchez Luna.
Al Festival Cultural Alfonso Ortiz Tirado viene de nueva cuenta, y en su espacio tradicional Restaurante Polos, para compartir las regiones que de a poco y constante captura en ese ejercicio toral de su vida. Porque sin la foto, dice Mario, la vida no sería igual.
Sánchez Luna aporta con su exposición, Cromática sonorense, encuadres óptimos para el corredor de arte plástico Ruta del Arte, en el cual ha participado en quince ocasiones. Aquí, en torno a las fotos que componen su exposición, esta plática.
—Cromática sonorense en un nombre permanente en tus exposiciones.
–Sí, fue una decisión que tomé porque no puedo ponerle una visión equis o paisaje equis, cromática sonorense abarca muchas cosas, es fotografía a color, y ya tengo alrededor de veinte años trabajando con este título. En todas las exposiciones son fotografías nuevas, nunca repito, excepto esta que es un homenaje a los niños de la Guardería ABC, esa sí la traigo siempre conmigo.
—¿Por qué eliges el paisaje?
–El paisaje es una visión particular que tengo para poderle transmitir a la gente lo que muchas veces no vemos. Podemos ir por la carretera y decir qué bonito el cerrito, pero nunca nos detenemos a ver otro punto de vista, nunca nos detenemos a ver, siempre miramos nomás. Con la fotografía de paisaje me gusta ver y transmitir lo que estoy viendo, dar mi punto de vista, para eso elijo el mejor ángulo, el mejor momento, y lo presento, por eso me gusta el paisaje, porque está allí, pero hoy es azul, mañana llueve y es otra cosa, al momento de hacer una fotografía así la veo, y así la comparto para que incluso la critiquen.
—Técnicamente tu trabajo es pulcro
–Utilizo la técnica normal, edito mis fotografías en la cámara, no utilizo ningún programa para maquillar, mis fotografías son normales. No puedo decir que me quedo a dormir para esperar la mañana o me quedo todo el día para esperar la noche y hacer una foto, siempre traigo una cámara y siempre hay oportunidad de tomar una fotografía.
—¿Cuál es tu mejor foto?
–Todavía no la he tomado, pero veo una fotografía que tomé hace una hora y digo: esta es la mejor, y esta no me salió bien, esta no me gusto, y no las puedo repetir, no las repito, puedo tomar una escena vertical, horizontal, pero es completamente diferente. La fotografía me ha dado mucha satisfacción, sobre todo por captar los paisajes, ese momento que jamás podrá repetirse.