Acompañada solamente de su mochila en la que carga provisiones, una casa de campaña y muchas metas, Bertha Corte atraviesa pedaleando desde el norte del país hasta Guadalajara en una hazaña a la que llama el regreso del caballo Blanco.
Bertha Corte llega a Puerto Peñasco procedente del Golfo de Santa Clara en unos de sus puntos de parada, recorre en su bicicleta más de 150 kilómetros de la carretera Costera, la cual le parece un camino lleno de matices por sus escenarios naturales de dunas, desierto y mar.
“La sorpresa, el asombro, la incredulidad llegaban a mis ojos de vez en vez, de trecho en trecho. No pude evitar hacer varios altos para capturar las imágenes escénicas que fueron apareciendo, provocativas y extraordinarias. Así fue todo el camino hasta que llegué a Puerto Peñasco”…
Ecóloga de profesión y originaria del Distrito Federal, Bertha a sus 58 años recorrerá más de 2 mil 400 kilómetros en una hazaña más que realiza en su bicicleta, desafiando los peligros de las carreteras desconocidas, los automovilistas, la propia fauna que se mueve en sus lugares naturales.
Pero todo vale la pena porque aparte de ir conociendo los rincones del país ella se da el tiempo de promover la cultura de cada lugar y las aventuras de sus recorridos en su bitácora de facebook y en su libro recién publicado “Un desafio a la Mexicana”.
Esta meta es solo una más de las que se propone la ciclista pues además en su estancia en Nueva Zelanda y Australia se dedicó por semanas a recorrer los pueblos y ciudades para dar a conocer las bellezas naturales de México, su cultura, gastronomía y sitios de interés en un intento de contrarrestar la mala imagen que tienen en aquellos países de México.
En su ruta por el estado de Sonora, visitó San Luis, Puerto Peñasco, Caborca y pasará por Hermosillo y Obregon para saltar a Sinaloa y seguir su ruta hasta Guadalajara en su hazaña del Regreso del Caballo Blanco.
