La obra llegó a Peñasco a actuar el rol de la mujer.
Un día recibimos un mensaje en nuestra página de que un grupo de Hermosillo venía a presentar una obra de teatro. Me entusiasmó bastante, me llamó la atención pues se presentaría en un escenario pequeño, de una forma más íntima, en un bar. Entonces el 17 noviembre pasado llegaron a Puerto Peñasco y presentaron en la Tequilera “Ni Princesas Ni Esclavas”.
Son los monólogos de tres mujeres, tres historias que parecen tener fascetas diferentes pero que converguen en un punto en común. Una obra del mexicano Humberto Robles (probablement uno de los dramaturgos contemporáneos más representados alrededor del mundo, les recomiendo que lo “googlen”), y en esta ocasion la presentó Sociedad Activa en asociación con Cucurumbé Teatro.
“Es un espectáculo cómico-cínico-cáustico-fársico, donde tres mujeres: un ama de casa, una sexo- servidora y una intelectual, nos narran de manera divertida las ventajas y desventajas de ser mujer. Mezcla el drama con un humor ácido, narra la vida de forma simultánea y las vicisitudes enfrentadas por estas tres mujeres, que puede ser cualquiera, la vecina, la amiga, la cuñada, la prima de un amigo. “ dice en su página de internet.
Dieron las 11 de la noche y vi desfilar por el bar a tres personajes. Los actores se transformaron y se entregaron a su público, sortearon con gracia (más que los presentes) algunos problemillas con el sonido. Ya después de una hora nos dolía la panza de tanta risa. En un momento casi se me sale la cerveza por la nariz por alguna cosa que dijeron. Sin embaro, te llegan, pegan duro con una realidad triste y de pronto muy común. Sientes que algo se te acongoja discretamente cuando invitan a la normalidad y a la felicidad desde la realidad que los personajes viven.
Entonces como es obvio no los pude dejar ir tan en blanco y ellos me concedieron una entrevista, que no pudo ser ese momento pero nos pusimos en contacto con Erica Salinas que me dijo que le pasara las preguntas, que estarían algo ocupados, pero que en una reunión después de una función la contestarían. Y me la mandaron por escrito días después.
Así que imagínenlos sentados en un escenario cómodo y empecemos con la entrevista.
¿Cómo se creo la idea de hacer la obra “Ni Princesas ni Esclavas” de Humberto Robles y por qué?
Erica Salinas: Conocí a Humberto Robles en el estreno del documental “ABC NUNCA MÁS” en la Cineteca Nacional, platicamos un poco de lo que hacíamos y quedamos en que sería padre hacer algo juntos. Incluso semanas después se hizo una presentación del documental en el zócalo y me gustó muchísimo la experiencia de poder ver la reacción de la gente en vivo. Y eso se conecta con que una amiga mía me invita a ver “Ni princesas ni esclavas” en el “bataclan” (un bar del DF), sin embargo no pude ir a verla, pero comencé a buscar información de la obra y me interesó el tema, ya que Sociedad Activa siempre hemos manejado temas sociales. Ese mismo día me puse en contacto con Humberto, para platicar acerca de los derechos de la obra y al mes siguiente que volví a Hermosillo, tuve la primer reunión con los actores.
¿Como se juntaron los actores y todo el equipo de trabajo? ¿Fue gracias a un casting, eran amigos, fue algo fortuito?
Erica Salinas: Desde hace 8 años Enrique López y Natzielli González han formado parte de Sociedad Activa, organización en la cual desarrollamos proyectos que transmiten mensajes positivos. Incluso con Verónica Vázquez trabajamos juntas en el proyecto de V-Day (Monólogos de la vagina) la primera vez que se montó en Hermosillo.
Por lo tanto, conozco su talento y su profesionalismo. Podría decir que hice este proyecto para poder trabajar con ellos, pues desde hace tiempo ya traíamos muchas ganas de hacer un proyecto más grande donde Enrique y Natzielli explotaran sus talentos histriónicos.
Entonces, ya teníamos los actores hacía falta la dirección y sin dudarlo pensé en Vero, pues conocía de su trayectoria con Cucurumbé Teatro; le presenté la idea, le gustó mucho y ese mismo día ya estábamos trabajando en la obra.
¿Cuanto tiempo llevo la preparación y desde cuando se presentan en escena? ¿Cuanto tiempo más van a estarse presentando?
Erica Salinas: Montar el proyecto nos llevó 3 meses, sobretodo la preparación de Enrique López, pues no fue nada fácil “convertirlo en mujer”, tuvimos un coach personal para trabajar la femineidad, aprender a andar en tacones. Vero trabajó mucho con su lenguaje corporal, pues queríamos que fuera una mujer no un travesti. A la par de esto, se iba preparando la parte mercadológica, manejo de redes sociales y conceptos de imagen.
El estreno fue el 17 de octubre y la temporada termina en noviembre, sin embargo tendremos una corta temporada navideña y el resto de las fechas será fuera.
¿Ya tienen en mente cual será el siguiente proyecto?
Erica Salinas: En cuestión de teatro por lo pronto es llevar esta obra al mayor número de lugares posibles, ya que creemos que es muy importante promover el arte, y de igual forma el invitar a las mujeres a ser más libres, más autenticas y a valorarse. Es un mensaje que queremos llevar a todos lados, por eso estamos buscando foros, así que si quieren la obra en su ciudad con gusto pueden contactarnos a hola@sociedadactiva.com.
De igual forma, hasta el momento es seguir presentando obras con sentido social, incluso Humberto ya nos pasó dos guiones más uno habla de violencia de género y otro de diversidad sexual. Ya lo platicaríamos con los actores para ver cuál nos gusta convence más.
Como Sociedad Activa en general, ya estamos en la etapa de platicas del siguiente proyecto de Pedro Ultreras, que también será un documental y con respecto a los derechos humanos, ya más adelante les diremos de qué se trata.
¿Cómo es que se animaron a presentar esta obra en Puerto Peñasco y cómo se sintieron?
Erica Salinas: Familiares de la dueña del bar donde nos presentamos le recomendaron mucho la obra, además de que ya había presentado una de “Cucurmbé Teatro”, y no dudo en invitarnos de nuevo.
Nos hizo la invitación unas 3 semanas antes y aprovechamos el puente para realizar el viaje y quedarnos un día más para disfrutar de la playa y del famoso malecón de Rocky Point.
Nos sentimos muy contentos con la respuesta de la gente, a pesar de ser puente y que la mayoría sale, tuvimos un lugar lleno y muchas carcajadas que al final de cuentas es lo que importa, que los asistentes disfruten, se rían y reflexionen un poco sobre la situación actual de la mujer en México.
Incluso tenemos una invitación por parte de la organización de mujeres profesionistas para regresar, asi que estén al pendiente que “amenazamos” con volver a este lugar tan bonito.
¿Cómo se sintieron en la presentación en Peñasco?
Enrique: Tranquilo, a gusto pero con curiosidad, por el hecho de ser un público totalmente ajeno a gente que yo pudiera conocer. Hacerle frente a un público totalmente nuevo representa un reto, porque nunca sabes como van a reaccionar, como puedan llegar a tomar los chistes locales y más aún cuando desconoces el tipo de publico que va a asistir a la función; como señores mayores, jóvenes, señoras del hogar o de que clase social sean, pero en este caso lo sentí muy heterogéneo.
Verónica: Excelente el público entregado y atento. Muy satisfecha con la respuesta de la gente.
Natzielli: Muy bien, muy agusto con la gente que nos recibió con cariño y risas.
¿ Por qué decidieron interpretar a ese personaje?
Enrique: En mi caso me lo propusieron, es la primera ocasión que interpreto a una mujer, decidí aceptar especialmente por que fue un gran reto personal, sencillamente por todo lo que conlleva cambiar de genero, en mi personaje particularmente se genera el arte de la transformación total. Debo confesar que a medio proceso de preparación del personaje estuve a punto de desertar del proyecto, porque no encontraba el personaje, no hallaba una línea a seguir, me sentía perdido; sin embargo gracias a la dirección y a mi búsqueda de “un color del personaje” pude encontrar la magia que actualmente le da vida a Thelma.
Verónica: Dicen que los personajes llegan a tu vida en un momento determinado por alguna razón y si no tenemos nada en común con el personaje al menos tenemos como actores la responsabilidad de transmitir su historia o mensaje.
Natzielli: Es un personaje que al principio me asignaron, pero he agradecido mucho que me haya tocado a mi “La Lupita”. Es un personaje entrañable que lo encontramos en cualquier lugar. Como es comedia, se presta para sacarle mucho jugo a la interpretación de este personaje. Yo me divierto muchísimo y hago un esfuerzo doble para aguantar la risa cuando el público se está carcajeando. Es divertidísimo hacer este personaje, que lamentablemente, lo podemos encontrar mucho en la vida cotidiana, y digo lamentablemente porque a pesar de que es muy divertida, sufre bastante privada de su libertad y felicidad.
¿Qué es lo que más les llamó o les intriga de este?
Enrique: Por las leyes de dios, de la naturaleza o del universo mismo, el hombre y la mujer siempre serán diferentes, por eso afirmo que a la mujer no hay que entenderla sino aceptarla tal cual es, con defectos y virtudes, sólo así puede funcionar una pareja, sin juicios de por medio, solo aceptación. Y en este caso me intrigo mucho este personaje por tratarse de una mujer, una excelente oportunidad para “entender” mejor a la mujer.
Cuando me lo propusieron, automáticamente vinieron preguntas a mi cabeza como: ¿podré caminar en zapatillas?, ¿qué se sentirá ser mujer? ¿Que tan femenino puede llegar a ser un hombre?, ¿la gente puede llegar a dudar de mi heterosexualidad?, ¿Cómo se ocultan lo que se tienen que ocultar, las personas que realmente se dedican a esto? Entre otras preguntas más. Esas son algunas de las razones que me llamaron la atención de hacer este personaje. Pero en definitiva, después de esta obra de teatro, ahora entiendo porque tardan tanto en alistarse para salir a su rutina diaria, benditas mujeres.
Verónica: De patricia me intriga que es una mujer que aparentemente lo tiene todo, inteligencia, buen trabajo, cualidades sin embargo vive inmersa en una profunda soledad llena de carencias afectivas.
¿Cuanta preparación se llevó cada persona?
Enrique: El proceso actoral, psicológico, de montaje, vestuario, memorización y tropicalización del guión, ensayos diarios, trabajo de campo del personaje, etc. Se llevo a cabo en 3 meses intensos con altibajos en los ritmos, más altos que bajos, con una estrecha relación con la directora. Tuve que aprender a andar en zapatillas, depilaciones, cambiar mi voz a tonos agudos, acostumbrarme a la sensación del cabello en los hombros, entender lo que es tener caderas amplias y glúteos abultados, cosas totalmente nuevas para mi, que de alguna manera las tuve que aceptar este o no de acuerdo con ellas para poder hacerlo de una manera natural, sin rayar en lo absurdo.
Verónica: Tres meses aproximadamente tanto en la dirección como en la construcción del personaje de Patricia.
Natzielli: Fue un trabajo “express” pero intensivo. Tres meses de preparación ardua que aún en cada presentación seguimos puliendo.
Aun con tanta risa, tiene sus momentos fuerte y con una crítica muy dura ¿que le dirían a las personas que van o que fueron a ver la obra?
Enrique: Que el arte (el teatro en este caso) debe ser un reflejo de lo que somos como nación, como pueblo; debe hablar de lo bien o de lo jodida que pueda estar una sociedad, que debemos ser ciudadanos más activos para cambiar la triste realidad que vivimos en México respecto a la posición de la mujer en la sociedad. Más allá de una ama de casa, una sexo servidora o una exitosa ejecutiva, antes que nada son mujeres y como tales son seres humanos, que como hombres debemos aceptar y amar como anteriormente lo mencione. Nos falta mucho por avanzar en nuestra “bendita” cultura, pero allí vamos poco a poquito. Antes estábamos dormidos, ahora por lo menos ya movemos las pestañas. Vamos lento, pero avanzando al final de cuentas.
Verónica: obra con mensaje útil de reflexión que nos permita generar cambios positivos en la gente tanto en hombres cómo mujeres.
Natzielli: Que reflexionen lo que está pasando en nuestro país. Esto nos da mucha risa pero es una triste realidad. Ver cómo el machismo sigue reinando, cómo la ignorancia llega al poder gubernamental con facilidad o cómo un talento puede podrirse por culpa “del qué dirán”, si no hago lo que la sociedad me obliga a hacer. Reflexionemos si en verdad somos libres y felices y si no, por qué no.
¿Después de esto, que sigue para cada uno?
Enrique: Uno tiene infinidad de planes, pero a final de cuentas es lo que Dios quiera, así habrá que preguntarle a él.
Verónica: Seguiré con otros proyectos de teatro en voces bar ya sea como directora, actriz o ambas cosas como en el caso de Ni Princesas Ni Esclavas.
Natzielli: Seguir actuando, seguir preparándome. Una vez que encuentras tu pasión, ya no hay marcha atrás.