El pasado lunes 16 de diciembre, el Auditorio Municipal estuvo hasta reventar de gente invitada al festival de fin de año de la Escuela Municipal de Ballet Clásico y la Escuela de Danzas Polinesias.
Ver a las niñas bailar es algo gratificante y divertido, desde a las pequeñitas (que no puedo mentir, son las más divertidas) hasta las más adelantadas y experimentadas, que son las que inconscientemente al verlas te hacen pararte derecha, levantar la cara y sumir la panza.
La tarde fluyó en un derroche de ternura, padres tomando fotos, tutús, zapatillas, flores y pompones.
Muy buen trabajo el que han hecho durante este año las maestras Mariana Zatarain en Ballet y la maestra Angélica Sotomayor en danzas polinesias.