Los síndromes de la orfandad

o Batman Vs. Superman, o Capitán América: Guerra Civil.
Ya sin riesgo de spoilers.

Por Andry Samp

Por primera vez agradezco a los dioses de la censura en México que no se atrevieron a cambiarle el nombre a estas películas… de lo contrario nos las hubieran contado.

¿Por qué? Porque, básicamente, estas dos películas se resumen a términos de la perdida parental, a un concepto muy, pero muy, primigenio, o de un serio complejo de Edipo.

La primera, dirigida por Zack Snyder, a quien yo le tenía un poco de fe después de “Whatchmen” o de “300”. Este director siempre tuvo un estilo visual muy particular, el cual modificó un poco en “El hombre de Acero”, pero que todavía  conservaba un poco de ese peculiar estilo. Los actores se ven muy bien. Se ve que trabajaron duro en el gimnasio; un aplauso para la toma con Ben Affleck preparándose para enfrentar a Supermán, y otro (con más fuerza) para Henry Cavill cuando le estaba preparando el desayuno a una muy pelirroja Luisa Lane.

Volviendo a la película, y en vista de todos los memes que se han hecho, el conflicto entre nuestros súper héroes se podría haber resumido en el nombre compartido (de manera involuntaria, aunque no creo que fortuita) de las progenitoras, a saber: Martha Kent y Martha Wayne. Debo de confesar que nunca me pasó por la mente que se llamaran igual.

En esta película, el villano, un muy caricaturesco Lex Luthor, que ahora entiendo porque no eligieron a Bryan Cranston (Breaking Bad), secuestra a la mamá de Superman, y lo obliga, en una escena muy, pero muy, ilógica a pelear con Batman…. Algo redimible de este absurdo, es lo grotesco de las fotos de la pobrecita Martha Kent (con cara de secuestrada y las letras de bruja en la frente). Nos tienen dos horas esperando el tan ansiado combate, y cuando llega, todo se reduce a una pelea que se resuelve con: Ella se llama Martha…..Es cuando te das dos golpes en la cabeza, y tienes el siguiente pensamiento: ¿Me quedé dos horas para esto?

La buena noticia es que combaten a un muy bizarro Doomsday, con la ayuda de la Mujer Maravilla, lo único rescatable como personaje de cómic dentro de la película, así como el tema musical que la acompaña. Y la promesa de una muy adaptada Liga de la Justicia.

Ahora, sobre Capitán América: Guerra Civil. Mucho más seria que la anterior, pero lenta, muy lenta también. El villano, el barón Zemo, pudo haber sido muy brutal, pero le dan el giro de padre que pierde a sus hijos, por lo tanto justificado; Pantera Negra, se hace Pantera porque perdió a su padre, e IronMan se enoja… por… por, porque mataron a su mami, y fue el Soldado de Invierno, o sea el amigo, casi hermano, romance del Capitán América, y por esto puede dejar ir vivo al villano, que los estuvo manejando a su antojo durante casi las tres horas que duró la película.

Menos predecible que la anterior, el clímax de la película que fue en dos momentos: La batalla del aeropuerto donde se recluta a Spiderman y Antman; y la batalla final entre Iron Man y el Capitán América.

AntMan gustó, tanto en su película individual, como aquí. No puedo decir lo mismo de Spiderman (adolescente), que me pareció, no sólo infantil, sino metido con calzador, a fuerza. Van de un lado a otro reclutando personajes, para evitar que otro personaje se vaya a otro lado, y entonces, me quedo pensando ¿no podrán aprovechar el tiempo e ir directamente?

Los efectos especiales estuvieron aceptables, nada memorable. De la adaptación de los cómics, estuvo mejor “La Era de Ultrón”, y de la música, tampoco nada que pueda recordar.

Ambas películas tuvieron eso: un síndrome de orfandad.  A todos les mataron a sus padres (esto me hace reconsiderar cuando mi hermano quiere ser como Batman, o se hace llamar Tony Stark). Para ser un súper héroe tu mami tiene que llamarse Martha, o debes de quedar huérfano en condiciones muy violentas, lejos de todo glamour. No digo que no me gustaron, solo digo que pudieron manejar otra arista, no solo esa, y me parece demasiada coincidencia, que dos de las mayores películas de cómics de este año se basen, en eso.

Pero… como soy amante de los cómics, le daré la segunda oportunidad a El Capitán América: Guerra Civil. No creo cambiar de opinión, pero la primera y única vez que la vi, cinco adolescentes nublaron mi buen juicio…. sentándose y cuchicheándose en voz alta junto a mí, así que volveré a ir, y trataré de hacerlo con la mente abierta, sentarme en mi lugar favorito, lejos de adolescentes, aunque salga Spiderman.

Pero después de “X-men, Apocalipsis” y espero con ansia “Dr. Strange”.

Comments

comments

Leave a Reply